domingo, 29 de mayo de 2011

Nunca menos.


No existe un por qué. Tampoco importa demasiado ahora. ¿Y que importa ahora? te preguntarás, igual que he hecho yo. Al principio, los primeros días no encontraba respuesta e incluso ahora dudo que la que te voy a dar sea lo más acertado, pero es la única que se me ocurre. Tú, Tú eres la respuesta mi queridísima hermana. Tú importas. Tú y si me lo permites, Tú conmigo.

Puedes creer que aquí la gente te ha olvidado, que la distancia, la enemiga que tanto temo, se apodera de nuestros recuerdos, de las pegadas que Tú has dejado aquí, pero ¿sabes que? no es así. Puede que no a todos, pero a la que de verdad te quiere, la gente que ese 29 y 30 de Septiembre estuvo a tu lado y te envió todas esas cartas de apoyo que hoy tienes en tu estantería no te ha olvidado, y sinceramente, dudo que lo logren hacer.

Y no quiero que pienses que aquí te recuerdan por la "niña a la que..." o "La niña esa que..." por qué no es así. Te recuerdan por Lara Gómez Vázquez , Lara, Laruchi, Larita, Lara Pote, Lola o SoyDeVenus. Porque esa eres Tú y ¿sabes qué? no tengo miedo a que crean que puedes cambiar porque sé que no lo harás.

¿Miedo? Sí. Mucho. Miedo a que un día ya no estés conmigo. A que te canses de luchar. Miedo a que te olvides de mi, de que te quiero y de que no puedo vivir sin ti. Miedo a que encuentres a una Venusiana mejor que yo y la prefieras a ella.

No creía que se pudiese hacer. Estar tan lejos de la persona más importante. Sigo sin creerlo. Pero lo estamos consiguiendo, vida mía, somos las mejores amigas del mundo y tenemos 100 km de distancia que nos "separa". Y ni los 100 km, ni la distancia, ni nuestra familia (que quizás estén un poco deshechas), ni el miedo puede, ni podrá hacer que te quiera menos, quizá más pero nunca menos.

Te quiero, mi vida. Muchísimo. Más que a nadie.

domingo, 15 de mayo de 2011

Historias


Hay tantas historias en el mundo como personas que habitan en él. Incluso más.
Menos de la mitad, un 40% más o menos, de las historias son tan reales como la vida misma. Un 10% más, son leyendas y no se sabe si son reales. El otro 50% de las historias son los libros, los cuentos, los rumores de una vieja chismosa, el programa de la tele que cuenta la vida de cualquiera que no puede ni hablar, los dibujos que ve tu hermano mientas se toma el biberón, la vecina que se le fue el hijo de casa porque tenía conjuntivitis y estaba ingresado que al final fue que el hijo tenía novia. Son aquellas historias de amor en que la pareja vive un romance prohibido y ese romance se termina por el suicidio de ambos pero perdura para siempre de otro modo.

Pulgas.

jueves, 5 de mayo de 2011

La comedia es una trajedia que le pasa a otro.


¿Hay mejor motivo para llorar que por algo que quieres?
En cualquier caso es mejor llorar por alguien que no va a volver . Lo duro es cuando ambas cosas están unidas.
Es diferente llorar por algo que ya no está porque alguien/algo se lo llevó, que llorar por algo/alguien que has perdido, que llorar por algo que se fue solito.
Porque en realidad no es mejor llorar por un motivo que por otro. La verdad es que llorar no es ni bueno ni malo. Si quieres llorar lloras y punto. Sin pedir permiso, sin dar explicaciones, sin necesidad de esconderse.
Y de repente paras, respiras. Haces memoria y sin ninguna razón aparente no recuerdas los motivos de esa llorera. No encuentras el origen de ese llanto. Y con los ojos rojos y grandes ojeras sigues con tu vida. Dándote cuenta que hay que tener cuidado. No debes fiarte de aquel que te dice "te quiero" la primera vez que te habla. Lo más difícil de confiar es saber en quien debes confiar. Y en quien puedes hacerlo.

Pulgas.